La mega mansión donde se filmaron varias escenas de la película El Padrino y The Bodyguard es parte de la exclusiva de las casas más caras que se han puesto a la venta en los Estados Unidos. Es más conocida bajo el nombre de Hearst, está ubicada en Beverly Hills y es propiedad de un magnate de los medios, William Randolph Hearst.

De acuerdo a un reconocido blog de bienes raíces, la famosa mansión primero salió a la venta en 2007 por la suma de 165 millones de dólares. Luego, en el 2010, su valor se redujo a 95 millones; pero como actualmente sigue teniendo problemas para venderse, redujo nuevamente su precio de venta.

Esta mansión fue construida en 1920 con estilo mediterráneo sobre un terreno de más de 4.600 metros cuadrados. La extensa propiedad cuenta con 5 edificios, su propio club nocturno, tres piscinas, 36 baños, y como si fuese poco, además posee un comedor con capacidad para 400 personas.

El proyecto, años atrás, fue diseñado por exclusivos arquitectos y diseñadores con magníficos parques. Y gracias a sus asombrosas construcciones, se dice que John F. Kennedy y su esposa eligieron a esta lujosa propiedad para alojarse durante su luna de miel.